miércoles, 26 de mayo de 2010

No woman no cry

No recordaba un dolor ni un llanto tan perennes. Hoy sólo quiero dejar que esta hiel me cubra y me duerma hasta tu regreso, dejarme devorar por las lágrimas y que me rasgue el tiempo como la voz de Janis y su Mercedes Benz. Hoy sólo quiero dejar que la vida me pase los días anegando el rostro y encogiéndo mis ojos hasta que desaparezca todo rastro de humanidad en mí, todo lo que fui, lo que soy, lo que esperaba ser... hoy me he rendido y dejaré que me arrastre la vida por el camino como si me hubiera caído del caballo y las bridas me arrastraran sin remedio.
Pero una palabra tuya bastará para salvarme.

sábado, 22 de mayo de 2010

Cosas que hacen que la vida valga la pena V

...que me llames, a cualquier hora, en cualquier momento, para decirme 'te quiero'.

Cómo decirte

Cómo decirte que te quiero tanto sin desgastar las palabras ni que pierdan el significado al saltar de mis labios. Cómo decirte que te echo de menos y que sin ti se me derrumba el mundo en cada silencio.
Cómo decirte y que tú sientas, que desde que estás en mi mundo no han vuelto las tinieblas, que ya no me asusta tornar al mar ni cortarme las raíces, que has hecho de mi la líbelula.

viernes, 21 de mayo de 2010

Rarezas

El olor del Vicsvaporub
en verano.

Cosas que hacen que la vida valga la pena IV

Que, tras mi llegada, me abraces tan fuerte y me susurres al oído, para que nadie nos oiga: no te vayas nunca.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Cosas que hacen que la vida merezca la pena III

Ahora que estoy sola. Es tarde. El ordenador encendido y al otro lado durmientes. Ahora que, aún vestida, sigo con las manos pegadas al teclado, pienso en esta tarde.
En ti y en tu abrazo, ese abrazo íntimo que nadie imagina, mis ganas de helado y tu vuelta con un presente que no pensé... Hay días que me levanto y no pienso. Días en los que la monotonía me puede y me aplasta. Y entonces llegas tú y barres mis nubes.
Ay, cursi de mí. Qué haré si un día te marchas...

lunes, 10 de mayo de 2010

La pesadilla del donjuán

(I) Cuando despertó, ella seguía allí.
(II) Sintió como sus pestañas estaban adheridas a él.
(III) La madrugada diluida entre los pliegues de su ropa.
(IV) El último acorde de la noche vibrando en el aire.
(V) La soledad remolona en sus párpados de sombras.
(VI) El silencio quebrado pesando en las sábanas.
(VII) Un suspiro perdido en la madrugada voraz.
(VIII) Los rayos acariciendo playas desnudas.

domingo, 2 de mayo de 2010

Otra tarde con Ryan

Es pronto en la tarde. El cielo de tormenta hace que me arrebuje entre el pijama demasiado colorido para una tarde tan triste y, sin embargo, no hay soledad que hoy pueda conmigo. Porque sé que estás a un segundo de mis ojos aunque ahora no te tenga, porque este temor a que te vayas me acerca y sólo me basta cerrar los ojos para recordarnos hace unas horas, para imaginarnos mañana. Para pensarnos un futuro construido entre las manos.